No es raro que, inmersos como estamos en la rutina diaria y en nuestras respectivas labores, perdamos la perspectiva general sobre las cosas relativamente positivas que tenemos en nuestras vidas. Es esencial pues que demos valor a estas cosas buenas, y darles la importancia que merecen.
Desarrollar la autocompasión es la capacidad de sentirse seguro en lugar de estar traumatizado: desarrollar flexibilidad en su mente para desarrollar una mente compasiva.
Practica la reestructuración cognitiva: Sustituye los pensamientos negativos por pensamientos más realistas y equilibrados. Por ejemplo, en lugar de «todo me sale mal», puedes pensar «a veces las cosas no salen como espero, pero puedo aprender de mis errores».
Las Autoinstrucciones son instrucciones que nos damos a nosotros mismos y que nos permiten afrontar determinadas situaciones de manera más adaptada, disminuyendo pensamientos negativos y el nivel de ansiedad.
Duele solo leer estos comentarios y, sin embargo, todos tenemos una vocecita inside que nos machaca despiadadamente. Nuestro crítico interno es nuestra tendencia a ser autocríticos y demasiado juzgones de nosotros mismos.
Cambiar este tipo de actitudes en nosotros puede resultar muy difícil al principio. La razón es precisamente que hemos creado un hábito en nuestro cerebro y cuesta mucho desahabituarse de nuestra forma de ser.
Es necesario responder a las críticas haciendo una evaluación realista y compasiva sobre uno mismo.
Los pensamientos negativos pueden afectar significativamente nuestro bienestar mental, pero existen estrategias efectivas que podemos implementar para combatirlos. A continuación, se presentan algunas recomendaciones clave:
Esta práctica puede ser tan straightforward como escribir una lista de nuestras fortalezas y leerla regularmente para reforzar una imagen positiva de nosotros mismos.
Estas pueden ser algunas de las principales causas por las que son importantes el cambio de pensamiento en las personas. Cada una de las frases negativas que nos ponemos en nuestra mente pueden frenarnos en nuestro desarrollo.
Anticipar el futuro: En la gran mayoría de ocasiones, las personas acaban temiendo a lo desconocido y sobretodo a la incertidumbre que puede prevenir del futuro. Es por ello que para cambiar los pensamientos negativos se debe dejar atrás este tipo de miedos que provienen de hechos que no podemos controlar. Estrés por el presente: Los pensamiento negativos y la ansiedad están muy relacionados. De esta forma, muchas personas les preocupa contínuamente lo que piensen de ellos o los sucesos que pueden pasar en su entorno.
Aprender a reconocer que cada persona tiene su propio camino y que las comparaciones son perjudiciales es esencial para silenciar esa voz interna negativa.
No es solo lo que dice tu click here diábrand inside, sino cómo lo dices también es importante. Savelle-Rocklin recuerda a una clienta que trataba de consolarse con un tono de voz derrotado y pesimista. Hablar contigo mismo con calidez y amabilidad puede sentirse como un »
El perfeccionista: este crítico interno se centra demasiado en los detalles y la perfección, lo que provoca una gran ansiedad y dudas sobre nuestra capacidad.